Dos prominentes rasgos urbanos definen el espacio en las inmediaciones de la Kunsthaus de Aarau: el conjunto histórico de sedes gubernamentales con sus expansivas escalinatas y terrazas, y el espacioso y arbolado parque, originalmente escondido tras la Kunsthaus y la biblioteca cantonal. La relación entre esos elementos se ha clarificado, permitiendo que funcionen como piezas arquitectónicas. La propuesta para la ampliación de la Kunsthaus parte así de preocupaciones fundamentales respecto al contexto construido. Hoy el parque se prolonga hacia Banhofstrasse, y la Kunsthaus alcanza el parque, constituyendo un todo. La ampliación del Kunsthaus se ha concebido como una terraza urbana elevada, que podría calificarse de arquitectura topográfica. Un elemento topográfico y paisajístico de esta clase se forma mediante la plaza elevada y poblada de plantaneros situada delante de la sede del parlamento.
Dicha plaza se complementa y se completa con la terraza de la ampliación del museo. Ademas, la nueva obra enmarca simétricamente el lado oeste del edificio parlamentario, reforzando así el estatus de la Aargauerplatz. La idea de superar la diferencia topográfica en altura mediante un cuerpo de escaleras, como en la sede gubernamental, se ha aplicado a la ampliación. Las nuevas escaleras funcionan también en muchos aspectos como un vínculo articulado.