Cooperativa Bancaria

Beltrán ARBELECHE, Miguel Ángel Canale

• Dirección: SARANDÍ esquina ZABALA
• Fechas inicio-fin: 1940-1961
• Programas: CENTRO COMERCIAL, OFICINA
• Información útil: 1940 - 1º Premio Concurso Circunvalación Durango, Zabala. 1961- ampliación Sarandí y Zabala.

Tomado de: Arigón, S.; Cesio, L.; Fernández, D.; Gómez, L.; Kutscher, C. Beltrán Arbeleche - Miguel Ángel Canale. Montevideo: IHA, Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, 2017.

En 1940 la Cooperativa Bancaria realizó un concurso para la construcción de su sede en un predio pasante con frente hacia Circunvalación Durango y hacia la calle Zabala. Arbeleche y Canale obtuvieron el primer premio. En 1946 concursaron para el edificio de la Caja Bancaria en Avenida Agraciada y también ganaron. Así se originó una relación profesional que se prolongó por más de dos décadas con dos organizaciones distintas pero estrechamente vinculadas, que se encontraban en pleno proceso de consolidación institucional y por ende de generación de su infraestructura edilicia.

La primera etapa fue la construcción del proyecto derivado del concurso, que consistía en un esquema muy simple de planta libre y un solo núcleo circulatorio, con una gran versatilidad para adaptarse al destino previsto. El volumen es construido con una altura similar al entorno inmediato por las dos calles y se expresa en ambas fachadas mediante un entramado estructural que vuela sobre la línea de edificación y permite grandes superficies vidriadas. Racionalidad, geometría y una clara vocación de modernidad que dialoga con el contexto de la Ciudad Vieja en ritmos, proporciones y escala.

Años más tarde, en una segunda etapa, proyectaron el edificio ubicado en la esquina de Zabala y Sarandí con la colaboración del Miguel Ángel Canale hijo, cuya obra culminó en 1961. Se trataba de un programa múltiple que amplió las funciones existentes e incorporó área de tienda en la planta baja, combinado con oficinas, salón de fiestas y sala de conferencias en los pisos superiores. Si bien la altura es similar al edifico de la primera etapa manteniendo una escala acorde al entorno, la resolución formal adquiere un tono abstracto, que en clave neoplasticista remite a expresiones vinculadas a la arquitectura moderna europeas de entreguerras. La planta baja vidriada se abre al espacio público y permite reconocer la función que alberga. Esta transparencia establece un contrapunto con el plano macizo superior revestido en pastillas cerámicas, perforado por ventanas horizontales corridas que otorgan una fuerte horizontalidad al conjunto. En la esquina, un mural de Saint Romain rompe la monocromía del conjunto en una composición también de carácter neoplástico que retoma ciertas líneas generales del edificio y aporta un acento expresivo.

Esta obra recuerda el edificio para Merlinsky y Syrowicz proyectado por Ildefonso Aroztegui pocos años antes, en la esquina de Mercedes y Río Branco. Se trata de una arquitectura cuya respuesta formal ha abandonado todo rastro de “carácter” y monumentalidad y manifiesta el cambio operado por Arbeleche y Canale en este periodo, visible también en las configuraciones propuestas en algunos edificios de vivienda y en el proyecto presentado para el concurso del Banco Hipotecario de 1956.

Ver además:

Arana, M., y Garabelli, L. Arquitectura renovadora en Montevideo 1915-1940. Montevideo: Fundación de Cultura Universitaria, IHA, Facultad de Arquitectura, 1991.

Margenat, J.P. Tiempos Modernos arquitectura uruguaya afín a las vanguardias 1925-1940. Montevideo: 2009.