Tomado de: Medero, S., Salmentón, J., Cesio, L. Ildefonso Aroztegui. Montevideo: IHA, Facultad de Arquitectura, 2014.
Ubicado en una esquina del centro de Melo, la planta se organiza siguiendo una línea diagonal al predio. Sobre ésta se reconocen una sucesión de espacios concebidos según los requerimientos del programa, desde el surtidor de combustible sobre la calle hasta el depósito ubicado al fondo. El volumen total se define a partir de dos sectores: los surtidores y el salón de ventas y exposiciones (con cubierta inclinada revestida de tejas) por un lado, y el garaje y depósito por otro. Ambos se articulan a través de un muro sutilmente curvo, cuya altura y tratamiento le otorga protagonismo en la imagen del edificio. Puede apreciarse en esta obra el uso desprejuiciado de diferentes materiales y texturas integrados en la composición: la piedra laja de los pilares (claramente sobredimensionados), las tejas, los muros de ladrillo visto del salón y el revoque balais. Sobre el muro curvo, Aroztegui colocó elementos salientes de efecto decorativo, de modo similar a como lo hacía –por ejemplo- Vilamajó en diversas obras de los años treinta y cuarenta.
Ver además:
AAVV. Revista de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, Nº 14. Montevideo: 2016
IHA. Modernos. Montevideo: Facultad de Arquitectura, Universidad de la República, 2015. Disponible en https://issuu.com/iha.fadu/docs/modernos-set-2015