La renovación de la librería del museo situado en el Parque Ueno en Tokio se realizó sobre el supuesto de mantener la estructura existente. Para eso, la nueva tiene un sistema de aislamiento sísmico que incrementa la resistencia contra terremotos.
Los usos y circulaciones existentes se mantienen, se adosan cajas vidriadas en la planta baja –al frente– y de tres pisos sobre la fachada posterior. En el interior lo viejo y lo nuevo entran en colisión realzando lo viejo, mientras este, revive con lo nuevo.