Szczecin

Szczecin (en alemán, Stettin) es la capital del voivodato de Pomerania Occidental en Polonia. Su población asciende según el censo de 2012 a 409.211 habitantes.

Szczecin se sitúa a orillas del río Oder al sur de la Bahía de Szczecin y la bahía de Pomerania. La ciudad se extiende a lo largo de la orilla suroeste de lago Dąbie sobre ambas orillas del Oder.

Su economía está marcada por su posición como uno de los principales puertos del mar Báltico contando con un gran tráfico marítimo y una notoria industria naval. La ciudad concentra también importantes industrias alimentarias, químicas y cementeras.

La ciudad de Szczecin conserva notables monumentos góticos: el antiguo ayuntamiento (1423) y varias iglesias construidas entre los siglos XIII y XIV. También es destacable su castillo de estilo renacentista, que fue residencia de los duques de Pomerania. De las antiguas fortificaciones conserva la Puerta de Berlín (1726–40), sede del actual museo patriótico, y la Puerta del Rey (1726).

Fue una ciudad alemana hasta 1945, cuando las potencias aliadas, no sin reticencias de Gran Bretaña, Estados Unidos y Francia que querían que permaneciera siendo alemana, sin ninguna razón histórica, se plegaron a las exigencias de la URSS, y se la arrebataron a Alemanía y se la concedieron a Polonia. Hay que decir que en esta decisión no tomaron parte ni Alemania (que no existía formalmente como pais), ni Polonia.

Historia

Szczecin fue probablemente fundada por tribus eslavas a comienzos del siglo VIII. Los eslavos fundaron un casco urbano adjunto al Cerro del Castillo, el que luego se convirtió en un puesto fortificado al expandirse hasta un vado del río Oder. El príncipe Miecislao I de Polonia tomó el control de la región entre los años 967 y 972. Alrededor del año 1005 los paganos de Pomerania se sublevaron, pero en 1080 toda el área había vuelto a estar bajo el control de la dinastía de los Piastas.

Fue sede episcopal (1124) y residencia de los duques de Pomerania. En 1243 consiguió la carta municipal que consagró su autonomía y en 1360 se unió a la Liga Hanseática. Ocupada en 1630 por el rey Gustavo IV Adolfo de Suecia, permaneció bajo soberanía sueca tras la Paz de Westfalia que puso fin a la Guerra de los Treinta Años. En 1720 Suecia la vendió a Prusia tras la Gran Guerra del Norte y ya durante el siglo XIX tuvo un notable desarrollo industrial y urbano.

En 1919 la región de Pomerania quedó dividida entre Alemania y el nuevo estado polaco. Szczecin fue nombrada capital de la provincia alemana de Pomerania, y ya durante la Segunda Guerra Mundial fue intensamente bombardeada por las fuerzas aliadas y la mitad de sus inmuebles y la casi totalidad de las instalaciones portuarias fueron destruidas. A finales del conflicto, los aliados le concedieron su soberanía a Polonia en la conferencia de Potsdam (1945).