Estambul es la ciudad más grande de Turquía, y una de las más grandes de Europa. Se sitúa entre Europa y Asia, dividida por El Bósforo, el estecho que une el mar de Mármara con el Mar Negro y que separa físicamente los dos continentes. La ciudad vieja se extiende por las dos orillas del Cuerno de Oro, una estrecha bahía que fue el puerto de esta ciudad. Al sur del Cuerno de Oro está la vieja Bizancio, y al norte se instalaron los almacenes y viviendas de los comerciantes extranjeros (antiguo barrio de Gálata), que forma también la parte vieja.
Bizancio fue el nombre original de la ciudad, establecida por colonos griegos de Megara en 667 adC y nombrada en honor de su rey Byzas. Esta ciudad estuvo en manos de los persas, que la ocuparon y la destruyeron en el siglo V adC. Recuperada por el espartano Pausanias en el 479 adC, comenzó a reconstruirla en el 478 adC. Más tarde Esparta tuvo que disputar su control a los atenienses, quienes la tomaron en el 409 adC, pero fueron expulsados en el 405 adC, aunque en el 390 adC volvió a manos atenienses.
Durante el Imperio Bizantino el emperador romano Constantino fundó de nuevo la ciudad como Nova Roma o Constantinópolis en su honor. La Caída de Constantinopla bajo dominio turco el 29 de mayo de 1453 fue un suceso que impactó a la sociedad europea de la época y que se considera el final de la Edad Media. La ciudad cayó tras un largo asedio y años de conflictos con los turcos, que ya habían conquistado el resto del Imperio Bizantino, debido al tesón del sultán Mehmed II, llamado en turco «El Conquistador ». Éste formó parte del Imperio Otomano hasta su disolución oficial el 1 de noviembre de 1922. Durante el período otomano la ciudad pasó de ser una ciudad bizantina imperial y cristiano ortodoxa a otra otomana e islámica.
Cuando la República de Turquía fue establecida por Mustafa Kemal Atatürk en 1923, la capital fue trasladada de Constantinopla a Ankara. Estambul se adoptó como nombre oficial en 1930.
En los primeros años de la república, Estambul fue pasada por alto en favor de la nueva capital Ankara, pero durante la década de los años 50 y 60 Estambul se sometió al gran cambio estructural. En los años 60 el gobierno de Adnan Menderes modernizó el país y en 1963 se firmó el Acuerdo de Ankara, que constituye el primer paso del país en su proceso de integración en lo que actualmente es la Unión Europea.
La ruta de las especias
Dicen que el primer café turco no se olvida nunca. Se puede acompañar de un simit (bollo de pan con sésamo) . A menos que se indique lo contrario, el café lo servirán azucarado. No debe revolverse.
El barrio del bazar está lleno de puestos callejeros donde pedir sabrosos kebabs de cordero o de pollo con el toque de la ciudad: un puñado de papas fritas mezcladas con la carne. Otra opción es bajar al muelle de Eminonu a comprar un bocadillo de pescado.
En Yeniçeriler Cad, donde se encuentra un sitio único: el patio de Corlulu Ali Paça, está la antigua escuela coránica reúne ahora unos cuantos cafés donde puede fumarse una pipa de agua con el famoso tabaco turco aromatizado. Es extremadamente suave. También se puede pedir un té turco, o el estupendo jugo de naranja.
Es mejor cenar temprano: Estambul es una ciudad de horarios desquiciados, y la flexibilidad de los restaurantes es grande, pero los de la zona del Bazar están más animados a primera hora. Los mejores están en el callejón de Incili Çavus. Se recomienda el lahmacub (pizza turca), las hojas de parra rellenas y los diferentes tipos de kebab, y de postre los baclawa, los famosos pasteles de hojaldre, miel y frutos secos.
Fuente: Guía 2014