Es uno de los primeros rascacielos ecológicos de Londres y un edificio perfectamente identificable en el perfil urbano de la City. Se apoya en un planteamiento radical desde el punto de visto técnico, arquitectónico, social y espacial. El edificio tiene 41 plantas y proporciona 76.400 m2 de superficie útil, en los cuales se incluyen oficinas y un centro comercial al cual se accede desde una explanada de reciente creación. En la parte superior del edificio hay una sala de reuniones que ofrece una espectacular vista panorámica de Londres.
Concebido a partir de una planta circular, y una geometría radial, se ensancha a medida que asciende y se estrecha al llegar al vértice. Esta forma característica responde a las limitaciones del emplazamiento: el edificio es más esbelto que un bloque rectangular de las mismas dimensiones y el hecho de que su perfil se estreche al descender hacia la base posibilita que el espacio público sea mayor en el nivel rasante. En términos ambientales, su perfil también contribuye a reducir la desviación del viento, en comparación con una torre rectilínea de un tamaño similar, lo cual ayuda a mantener un entorno agradable en el nivel de la calle.
El propio Foster expresaba: “La torre plantea una nueva relación entre la naturaleza y el lugar de trabajo, y que presenta un cerramiento eficiente en términos energéticos que supone descomponer los muros y la cubierta en un revestimiento triangular continuo”.
El crítico Rob Gregory explicaba:
“Cada planta está subdividida en 72 módulos de 5°, con crujías alternas revestidas con una de las dos unidades de acristalamiento con forma de rombo empleadas: la primera de ellas es un rombo plano que se prolonga de planta a planta, mientras que la segunda está dividida y plegada en dos triángulos para ayudar a dar forma a la suave éntasis del edificio.”
La estructura arriostrada en diagonal de la torre permite contar con espacio en planta libre de columnas y con un envoltorio completamente de cristal dando ligereza y transparencia al edificio. Los atrios situados entre los dedos que irradian de cada planta se enlazan en el plano vertical y componen una serie de espacios de ocio que suben alrededor del edificio, los cuales funcionan como pulmones del edificio, posibilitando el ahorro energético del edificio.
A su vez “Para optimizar la diferencia de presión creada por el viento al acelerarse alrededor de la forma curva del edificio, se diseñaron unos atrios en espiral que cortan las zonas de bajas y altas presiones y crean un gradiente de presión interno” (Gregory, 2008).
Extraído de: Patrimonios recientes. El High Tech londinense. Por Marcia Rodríguez. Disponible en: http://www.fadu.edu.uy/viaje2015/articulos-estudiantiles/patrimonios-recientes-el-high-tech-londinense/
En el marco del curso Profundización Académica del Viaje de Arquitectura.
Referencias:
Foster, +. P. (s.f.). Foster + Partners. Recuperado el Junio de 2016, de www.fosterandpartners.com/es/projects/30-st-mary-axe
GREGORY, Rob. Edificios clave del siglo XXI. Plantas, secciones y alzados. Editor: Parramón; Edición: 1 (1 de septiembre de 2008) Colección: Arquitectura contemporánea