Construida como tributo al Gran Duque de Finlandia, el Tsar Nicholas I de Rusia, la iglesia se establece como punto importante dentro del skyline de Helsinki, siendo diseñada para completar el conjunto urbanísitico de la Plaza del Senado. Se destaca por su estilo neoclásico, donde resalta el gran domo central rodeado por otros cuatro de pequeñas dimensiones. La planta se desarrolla en forma de cruz griega orientada hacia los cuatro puntos cardinales y culminando cada brazo en una columnata con frontón.