Este proyecto surgió como contrapropuesta a la solicitud de EPM de renovar y ampliar el área de aparcamientos localizada enfrente del edificio inteligente, propiedad del grupo. El sitio era un área semiabandonada de unas 3 hectáreas, bordeado por importantes vías y conectado a edificios de valor cultural, histórico e institucional de la ciudad. El centro administrativo La Alpujarra se encuentra a pocos metros, aunque sin buena conexión peatonal.
"El proyecto propuso un gran espacio abierto de uso público, recreativo y cultural, conectado visual y físicamente con los espacios adyacentes, y servido por un museo interactivo cuyo basamento alberga usos comerciales.
De las 3 hectáreas disponibles se ocupó 1,20 hectáreas para aparcamientos y se agregó una parcela de casi una hectárea, adyacente al edificio EPM, para completar los espacios requeridos inicialmente. Los bordes se materializaron como taludes verdes que ocultan la presencia de los automóviles desde la calle y un paso peatonal a nivel, arbolado y provisto de mobiliario urbano, se convierte en el límite con el parque, que ocupa las casi 2 hectáreas restantes de la superficie original.
El parque se conforma con espacios de carácter diverso: una gran explanada urbana, que se enfrenta al acceso principal y atrio del edificio EPM, un área verde y arbolada que rodea un espacio central plantado completamente con bambúes y un área cubierta de materiales diversos como arena, grava y piedra, que contiene el sector de niños y sus respectivos espacios de uso pasivo, para padres y otros usuarios.
La explanada y el área de niños se conectan directamente con el espacio público ocupado por el Museo de Ciencia que, a manera de borde, se levanta en el extremo oriental del parque.
Tanto la explanada como el área verde que enmarca el bambusal están plantadas con árboles nativos de gran porte; la plaza seca presenta una doble alineación de búcaros, que fueron trasplantados de las riberas de la región para asegurar su tamaño. Los únicos senderos de diseño irregular del parque se encuentran dentro del bambusal, trazados como pasos peatonales entre el follaje denso que se conforma naturalmente.
El desnivel existente entre las calles opuestas, de casi un metro, se utilizó a favor de la creación de una topografía irregular, con uno de los bordes a nivel de la calle y el otro, en coincidencia con el área de aparcamientos, elevado gradualmente con respecto a aquél."
Fuente:
https://arqa.com/editorial/medellin-r/parque-de-los-pies-descalzos-y-museo-de-ciencia-y-tecnologia-2