Tomado de: IHA; SMA. Bienes de Interés Municipal. Montevideo: Facultad de Arquitectura, Universidad de la República, 1997.
El predio, ocupado por una casona donde funcionó "El Día" por algunos años, fue adquirido por José Batlle y Ordóñez en 1924.
Demolida esa edificación, se levantó esta obra emblemática, que se emparenta a nivel de imagen con la sede para la Intendencia Municipal de Colonia, del mismo autor.
Un programa moderno se resuelve con un lenguaje neoclásico, que connota mediante el vocabulario prestigioso de la tradición grecolatina, los valores de equilibrio, poderío y solemnidad, como símbolos de la función pública que se deseaba adjudicar al diario de Batlle.
El fuerte basamento que imita la sillería en piedra recorre ambas fachadas, y está perforado sobre 18 de Julio por un triple acceso.
El cuerpo principal presenta un amplio hueco central delimitado por columnas corintias colosales que abarcan dos niveles. Este motivo organizador de la fachada queda enmarcado por un potente entablamento y por dos sectores laterales que reconstruyen la pureza del volumen estereométrico. El mismo motivo se repite, pero en versión plana, en la fachada sobre Yaguarón, transformando las columnas en cuatro pilastras corintias colosales. El extremo derecho de esta fachada presenta elementos del lenguaje Art Déco.
Un remate retranqueado, culmina el edificio y manifiesta al exterior su organización centralizada. El hall, con su pavimento de diseño circular, acusa la presencia del majestuoso vitral que conforma la cúpula, organizado en círculos concéntricos, en el que se disponen los signos zodiacales. Cuatro potentes pechinas, cada una conteniendo una emblemática águila imperial en símil bronce, descargan el peso de la cúpula en los ángulos del hall, enmarcando cuatro arcos desde los que se balconea la planta baja desde el primer nivel. Un alto zócalo en mármol rodea este espacio, al igual que un entablamento continuo sostenido por columnas jónicas adosadas a los muros. El uso de mármoles nacionales de distintas vetas y colores permite realizar los diseños de pavimentos y de la superficie muraria donde culmina el tramo principal de la escalera, que a partir de allí se bifurca en dos ramales simétricos que conducen al piso superior.
Alrededor de este espacio estructurador de doble altura se disponen, más allá de una circulación perimetral, las dependencias que pertenecieran al diario.
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Tomado de: " Los días del Neoclasicismo", Suplemento Domingo, Diario El País, Montevideo: 23 de Marzo de 2003.
Cualquier similitud entre el edificio del diario El Día de 18 y Yaguarón y el de la Intendencia de colonia es totalmente deliberado. Ocurre que ambos fueron concebidos por el mismo arquitecto, Diego Noboa Courrás, y en ambos se respira, apenas se los enfrenta , el clamor neoclásico que imperó en Montevideo durante casi un siglo, empezando por el emblemático Teatro Solís de Carlo Zucchi, proyectado en 1840 y terminado en 1856. (…)
Como todos los historicistas, Noboa Courrás bebió muchos en la fuente de los colegas de siglos atrás, y no cuesta ningún trabajo descubrir el fervor neoclásico en la pasión que derrama sobre esas fachadas de poderosas columnas estriadas que rematan en capiteles jónicos o corintios, en el empleo del mármol y en la paleta muy clara para vestir sus invenciones. Como también suele ocurrir con los arquitectos de gusto neoclásico, las escaleras son de importancia mayor, sobre todo cuando se trata de arroparlas con guirnaldas de hierro manchadas con bruñidísimo bronce, al igual que los pasamanos.
Bien de Interés Departamental. Decreto Departamental Nº 26.864. Fecha: 1995.
Ver además:
AAVV. Guía Centro. Montevideo. Elarqa Tomo 2. Montevideo: Dos Puntos, 1995.
Artucio, L. Montevideo y la arquitectura moderna. Nº 14. Montevideo: Nuestra Tierra, 1971.