Tomado de: AAVV. Buena Salud. Arquitectura y Salubridad. Elarqa Nº 14. Montevideo: Dos Puntos, 1995.
El proyecto para el sanatorio de la Médica Uruguaya se implanta en un terreno de difícil conformación. Se trata de un predio el forma de "L" que presenta frente a la avenida 8 de Octubre un amplio sector, en tanto el frente es estrecho por Av. Italia. Los arquitectos optaron conformar dos bloques: uno, bajo, que se desarrolla paralelo a 8 de Octubre y que contiene esencialmente los servicios de atención primaria y consultorios externos; el otro bloque, perpendicular y enlazando ambas avenidas, se desarrolla en altura (planta baja y cinco niveles altos considerado desde 8 de Octubre) y que contiene fundamentalmente los pisos de internación. Se suman a ello tres niveles de subsuelo en los que se localizan el block quirúrgico, el acceso de ambulancias que se realiza desde avenida Italia aprovechando el desnivel existente entre ambas calles.
Desde el punto de vista formal el edificio mantiene una cierta independencia de las condicionantes funcionales que exige un programa complejo y riguroso y llega a materializarse en un volumen façonné tratado como una escultura a escala urbana. Se logra un producto arquitectónico donde la influencia de un racionalismo nacional (con antecedentes en la obra de M.
Payssé Reyes o Lorente Escudero) se ve suavizada por el juego de curvas, que la elección del material de revestimiento (ladrillo de campo) termina de modelar incorporando textura y valor cromático a las superficies.
El hábil manejo de llenos y vacío, la incorporación de terrazas y logias, el tatamiento de la azotea y de los volúmenes de ascensor y tanque de agua revelan un pormenorizado y completo estudio formal del edificio que resulta en una imagen coherente de gran expresividad, por otra parte necesaria en un punto urbano de escasa caracterización.
Tomado de: Margenat, J. P. Tiempos modernos. Arquitectura uruguaya afín a las vanguardias 1940-1970. Segunda Parte. Montevideo, 2013.
El edificio destinado a sanatorio de Médica Uruguaya fue adjudicado por concurso en 1966, a Walter Chappe y Adolfo Pozzi. El predio destinado para erigirlo tiene forma de L y un espacio muy restringido lo cual no impidió alcanzar una solución satisfactoria. La construcción toma una franja del terreno angosta que va de Avenida Italia a 8 de Octubre. Del lado de 8 de Octubre se desarrollan en un volumen más bajo con servicios de atención primaria y consultorios externos, en tanto el volumen que se desarrolla hasta la Avenida Italia alcanza una altura mayor, alojando las piezas de internación.
El tratamiento externo es con ladrillo a la vista y en ambos extremos del bloque alto culmina con un vigoroso tratamiento de formas curvas de gran protagonismo. Del sistema rigurosamente ortogonal y equilibrado de las principales obras constructivistas de Payseé, poco queda. Solo el uso del ladrillo, lo que no va en desmedro de la obra. Este cambio en el lenguaje no afecta la consideración del acierto de su potente enfoque arquitectónico.
Tomado de: “Criterio del edificio”. En Corporación Médica Uruguaya. Concurso de Anteproyectos. Montevideo, 1965. IHA. Carp.1904 f. 22.
Se trata de realizar un edificio de Policlínicas y Sanatorio para el enfermo, para el operado, para el convaleciente, de manera tal que curen pronto, en las mejores con los menores gastos posibles. Se quiere un edificio atractivo, estimulante, dúctil y económico.
Atractivo: con un interior agradable y luminoso (que no quiere decir demasiado vidriado), con espacios cerrados, abiertos y enjardinados de calidad, pero sin ampulosidad ni pretención;
Estimulante: tanto para los que allí concurran o se internen, como para los que en él trabajen;
Dúctil: es decir apto para los cambios y ampliaciones, que nuestra cambiante época y la evolución de la Medicina requiere y,
Económico: aunque no ordinario ni mezquino, sino una verdadera expresión de la Arquitectura actual con todos los adelantos que la técnica asistencial moderna exige; de buena calidad al menor costo y que tenga, por ahora, las plantas estrictamente necesarias pero con posibilidad de futuras ampliaciones (principalmente en los internos del Sanatorio). (…).
Entre todos los temas de Arquitectura que se realizan en nuestro medio, este tipo de edificio, sanatorio con servicios asistenciales y de administración, quizás sea el que ofrece mayores dificultades en lograr o aún acercarse a la perfección.
Efectivamente además de un complicado planteo de relaciones funcionales, que debe ser resuelto lo más fácil y claro posible, exige un rigor de eficacia en sus servicios, instalaciones y particularidades que unidos a los inherentes problemas constructivos, económicos y de confort, hacen muy difícil obtener el ideal de perfección que se pretende alcanzar.
En este tema los límites extremos, mínimos y máximos de las áreas, para lograr la necesaria eficiencia al menor costo están muy próximos; las exigencias técnicas y las relaciones funcionales son muy rigurosas y en ningún otro hay tan estrictos requerimientos funcionales y tan concretas precisiones técnicas. (…).
Primer premio Concurso Privado, 1965.
Bien de Interés Departamental. Decreto Departamental Nº 35.639. Fecha 13/08/2015.
Ver además:
http://concursos.fadu.edu.uy/index.php/concursos/medica-uruguaya/
Disponible en IHA planos arquitecto O. Corlazzoli, reforma, 1980. IHA. Pl. 16572 a 16578