Tomado de: IHA. Modernos Liceos del Uruguay. Montevideo: Facultad de Arquitectura, Universidad de la República, 2015. Disponible en https://issuu.com/iha.fadu/docs/liceos_-_modernos-set-2015
Ejemplo que condensa las búsquedas modernas de la época y es un exponente relevante de la serie de liceos proyectados por el MOP en un periodo de construcción de un verdadero proyecto educativo.
El edificio se implanta en un predio amplio, en una zona con baja densidad y una morfología de borde de manzana cerrado característica de las ciudades del interior. A pesar de estar en el centro de la ciudad, a una cuadra de la plaza principal, la presencia de varios predios de grandes dimensiones vacíos al momento de su construcción -que hoy contienen la agrupación más importante de edificios educacionales de Salto: IPOLL, Regional Norte, Comedor Universitario- otorgaba mayor libertad a los arquitectos y constituía una oportunidad.
El edificio se resuelve con un volumen lineal de 3 niveles y simple crujía que se articula con otro, el volumen de acceso, perpendicular a él. Se ubica colocando las aulas hacia el norte con una actitud moderna que prescinde de la geometría predominante que aporta la cuadrícula urbana. De esta manera el liceo hace acto de presencia en la ciudad, se manifiesta en su lógica moderna, señalando en el vacío urbano “el futuro” de la ciudad.
Si bien el eje heliotérmico vinculado al programa a resolver comanda la posición del edificio, las particularidades del sitio son tenidas en cuenta y se utilizan con gran habilidad para resolver otros aspectos. El hall de entrada y el salón de actos en el nivel intermedio y la cantina en la planta baja -los espacios más públicos del liceo- se ubican en el volumen de acceso generando de esta manera el vínculo con la ciudad existente. Este volumen, un puente, permite resolver también la singularidad de un terreno con pronunciados desniveles que descienden en sentido contrario de la calle de acceso.
El resto del programa y su distribución responde al esquema general que la oficina de arquitectura del MOP ya tenía experimentado y se corresponde en los tres niveles; aulas, laboratorios, sector administrativo.
En la articulación de los volúmenes se generan los espacios exteriores -patios, canchas- en estrecha vinculación con el interior e integrados a través de grandes vidrieras , fluidez espacial moderna propia de la arquitectura nacional.
La pureza volumétrica se corresponde con fachadas claras y simples, con franjas continuas horizontales -vidriadas y llenas- que refuerzan la horizontalidad de la propuesta. “Las fachadas son puestas a trabajar a favor de la transparencia, pero no una transparencia entendida como la no-opacidad, sino como honestidad” . La estructura de hormigón armado se acusa en fachada, y permite la transparencia necesaria para dar cuenta de las funciones interiores, mostrando esa ideología ruskiniana dominante en la modernidad respecto a que la estructura debía expresarse con claridad y a la honradez de los materiales.
El IPOLL como institución ocupa un lugar de importancia en el imaginario colectivo salteño. Fundado en 1873 como Instituto Politécnico ha cumplido un rol de avanzada respecto a la educación en el orden local y regional. Pasaron por sus aulas Carmelo de Arzadum, Enrique Amorin, Eriberto Prati, Marosa Di Giorgio entre otros actores de la vida cultural y social del país. Desde sus espacios, y desde 1971 en el “nuevo edificio”, se ha promovido el teatro, las artes plásticas, el periodismo, el deporte, siendo un ámbito generador de ciudadanía y en el cual los salteños se sienten identificados.
Ver además:
Danza, Marcelo. Dos Cuerpo en Salto. Trabajo tutelado del Programa de doctorado Conjunto "Teoría y práctica del Proyecto arquitectónico" farq. UdelaR y Elsam - UPM.