Tomado de: IHA; SMA. Bienes de Interés Municipal. Montevideo: Facultad de Arquitectura, Universidad de la República, 1997.
El edificio que albergara las instalaciones del establecimiento "El Chaná" -orientado a la producción de cafés y tés-, respondía claramente a las exigencias específicas del programa. Ubicado en un predio relativamente céntrico, con un área cercana a los tres mil metros cuadrados, posee frentes hacia las calles Colonia y Dante. Sobre Colonia se ubicaban en planta baja los salones de venta y en planta alta las oficinas, y sobre la calle Dante, los garages, cocheras y caballerizas.
Entre ambos sectores se desarrollaban las diferentes secciones del establecimiento -laboratorio, torrefacción, cafés crudos, molino, tés, envasado, etc.-, contando además con un pasaje vehicular que atravesaba todo el predio, conectando el conjunto.
El manejo de la simetría domina la composición del edificio principal. Este se resuelve en dos niveles, con un cuerpo central que avanza ligeramente, y sobre el cual se levanta la llamativa torre que culmina en una curiosa lámpara. Cinco amplios vanos en cada nivel, alivianan una fachada de importante desarrollo.
Los tres vanos de planta baja que se inscriben en el sector central correspondían al salón de exposición y ventas, mientras que los laterales materializan los accesos: el vehicular a la izquierda, y el acceso a oficinas y planta alta a la derecha, ambos con importantes rejas de hierro.
El lenguaje con que se maneja el tratamiento expresivo general del edificio puede catalogarse como ecléctico, con motivos afrancesados. El tramo central es el que concentra la mayor carga decorativa: pilastras en los extremos, medias columnas en el vano intermedio y un gran bajorrelieve alusivo al indio Chaná, todo lo cual dirige el interés visual hacia el arranque de la torre, donde se interrumpen la cornisa denticulada y la balaustrada corrida que rematan el edificio.
La torre en sí misma, por su altura y tratamiento, resulta de particular significación y representatividad. En ella puede apreciarse aún hoy, un magnífico reloj, de origen alemán, catalogado por sus características como único en nuestro país.
Hoy el edificio ha sido dividido en dos, y si bien su exterior no ha sufrido grandes alteraciones, su interior ha sido muy modificado. En la planta baja, sobre la calle Colonia, en el ex-local de ventas -que se destina hoy a templo- puede apreciarse aún una interesante estructura perimetral de madera a modo de entrepiso, que libera en la zona central el pasaje de luz a través de tres claraboyas ubicadas en la planta superior.
Más allá de las transformaciones sufridas y del cambio de destino, el edificio permite apreciar la magnitud de esta empresa dedicada a la producción de cafés y tés, testimoniando un particular momento de la producción industrial manufacturera del país.
Bien de Interés Departamental. Decreto Departamental Nº 26864. Fecha: 1995.
Ver además:
IMM. Guía Arquitectónica y Urbanística de Montevideo. Montevideo: Intendencia Municipal de Montevideo. Facultad de Arquitectura, Universidad de la República. Junta de Andalucía, 2008.