Tomado de: Cesio, Laura, "A dos tiempos. Vilamajó y Dieste en Durazno", Vitruvia Nº3, 2017. 59-84
El 29 de noviembre de 1939 Julio Vilamajó aceptó el cargo de asesor de la Comisión Nacional de Educación Física (CNEF) con el fin de realizar la implementación de un programa de construcciones deportivas para todo el país en el marco de un Plan de Acción. El primer proyecto que abordó fue el de un campus para la ciudad de Durazno, del que se concretaron entre 1940 y 1941 solamente las gradas y la cancha de básquetbol. (...)
En relación con el proyecto para el campus de Salto, don Julio escribe, bajo el título «El futuro», sobre la importancia de la ubicación de estos proyectos, analizando los problemas de la urbanística que tienen los centros poblados en general. Las características que señala a tener en cuenta para el emplazamiento son la proximidad al centro poblado, la vinculación a un parque y una topografía favorable para la solución económica de las grandes instalaciones para espectáculos. «Esta clase de ubicaciones han sido utilizadas desde muy antiguo por el hombre, los estadios y teatros griegos, los teatros romanos y muchas obras modernas nos ofrecen ejemplos de la utilización de las pendientes para resolver a poco costo y con gran magnificencia la realización de estas construcciones».(17) Vilamajó no elige el sitio en Durazno, pero este coincide con sus reflexiones, o tal vez es el disparador de aquellas. (...)
Colaboró con Vilamajó en este trabajo el arquitecto Guillermo Jones Odriozola, ocupándose «en detalle del gimnasio cubierto, el grupo social y el parador que constituyen el núcleo edificado del citado “Campus”».(25) Estos tres edificios proyectados aparecen como configuraciones abiertas, asimétricas, con una estructuración funcional clara y contundentes volumetrías, como puede observarse en los gráficos. En la escala edilicia hay también un aprovechamiento de la topografía del lugar, de la que se saca partido, con un gran sentido de la importancia de la economía, usando los desniveles tanto para la implantación como para generar subsuelos abiertos por uno de sus lados.(...)
Ninguno de estos tres edificios se construyó. Sin embargo, un análisis del proceso de concreción de las gradas y las canchas, si bien parcial y acotado en relación con el ambicioso programa planteado, permite comprender algunos conceptos que Vilamajó había utilizado en la Casa de Comando y las viviendas del Rincón del Bonete, y que más tarde utilizaría, radicalmente, en Villa Serrana, como ha observado Lucchini.(27) (...)
El Nuevo Gimnasio
En 1973 se le encomendó a la empresa Dieste y Montañez el cerramiento para el gimnasio municipal de Durazno. «Efectivamente yo trabajé en el Nuevo Gimnasio, en el que resolvimos utilizar el mismo proyecto de bóvedas del Packing de Caputto en Salto, con las adaptaciones que juzgamos convenientes y necesarias»,(34) afirma el ingeniero Romero, colaborador de Dieste.
La solución adoptada para el packing y trasladada al gimnasio fue la de bóvedas de doble curvatura atirantadas, con una luz de las de mayor dimensión realizadas hasta ese momento.(35) El programa no era novedoso para la empresa, que había realizado en 1958 el gimnasio de Artigas, en 1961 el de Dolores, en 1963 el del liceo 18 en Montevideo y en 1967 el de Maldonado. Todos ellos tenían luces menores que el de Durazno.
«Creo recordar que existían solo gradas a un lado. Por eso nosotros pudimos elegir el vano de la bóveda. De lo contrario, deberíamos habernos adaptado a la luz original, no pudiendo reutilizar el proyecto de las bóvedas del Packing de Caputto. Lo contrario sería de una probabilidad bajísima, casi un milagro.»
«Entrando en un campo de ideas, no de historia ni de recuerdos, me atrevo a decir que la intención expresa de la Intendencia fue preservar las gradas, actitud que creo normal en un buen administrador de la cosa pública, y también actitud normal en las obras de Dieste y Montañez. En ese sentido le recuerdo que en la Iglesia de San Pedro de Durazno preservamos todo el cuerpo frontal, que si bien fue un pedido expreso y fundado del entonces párroco, el padre Raúl Silva, fue plenamente compartido por Dieste, Castro y por mí mismo.» (...)
Apreciación estética, valor económico, memoria histórica y una consciente transformación a futuro asoman en Dieste al enfrentarse a lo construido y pueden leerse, aunque no esté explicitado, en el «Nuevo Gimnasio», viejo «Estadium», de Durazno. A pesar de que la intervención genera un recinto completamente cerrado que se contrapone a la idea de Vilamajó de un espacio abierto a la manera de los teatros griegos, balconeando hacia el paisaje circundante, la solución de cubierta, la espacialidad interior y el manejo de la luz dan una sensación de cierta permeabilidad que permiten intuir ese otro espacio exterior. (...)
Cuando se ingresa en el gimnasio de Durazno, como en todas las obras de Dieste, se percibe el amplio espacio, unitario, donde las formas curvas de la delgada lámina del techo son resaltadas por la luz cenital.
La luz y el ladrillo modelan las superficies y transforman la gran escala en una más humana. Es un tipo de espacio que puede emplearse casi en cualquier lugar. Sin embargo, no es un espacio neutro. Como señala Silvestri, el espacio en Dieste es distinto del espacio fluyente e indeterminado que caracteriza los esfuerzos modernos de entonces. Lejos de postular una operación abstracta, amatérica, se liga directamente a los valores de los límites construidos.(45) (...)
Vilamajó y Dieste coinciden en un espacio, en dos tiempos diferentes. Sin que la intervención en Durazno sea relevante en la producción de ninguno de los dos actores, permite percibir complejas maneras de entender el proyecto que remiten, en un orden más general, a momentos del pensamiento comunes. Ni Vilamajó ni Dieste responden directamente a los paradigmas dominantes en la disciplina en sus respectivos momentos históricos.
Hay en ellos una particular interpretación del espacio existencial, de los materiales y técnicas constructivas, de la economía y de la arquitectura en su dimensión sociocultural. Sería inconducente, y tal vez erróneo, establecer una relación directa entre ambos. Las coincidencias se pueden descubrir en el plano de un sólido trasfondo moral y cultural.
17. Julio Vilamajó. IHA. Carpeta 525/1 a 7.
25. IHA. Carp. 523/38.
27. Lucchini, Julio Vilamajó, 186.
34.Entrevista realizada vía correo electrónico el 26 de enero de 2017 al ingeniero Raúl Romero, colaborador de la empresa Dieste y Montañez.
35. El Packing de Caputto fue realizado en 1971 con bóvedas de 46,5 metros de luz. El gimnasio de Durazno tiene una luz de 45 metros.
45.Graciela Silvestri, «Una biografía uruguaya», Escritos sobre arquitectura. Eladio Dieste (Montevideo: Colección Ramos Generales, 2011).
Vilamajó ver además:
AA.VV. Julio Vilamajó. Disegni per l’arredamento. Nápoles: Edizione Oxiana, 2005.
AA.VV. Julio Vilamajó. Contratiempos Modernos. Elarqa Nº 2. Montevideo: Dos Puntos, 1991.
AAVV. Revista Arquitectura, N°173. Montevideo: Sociedad de Arquitectos del Uruguay, 1932.
Alemán, Laura; Nieto, Mónica; Parodi, Aníbal. Julio Vilamajó: fábrica de invención. Montevideo: Museo Nacional de Artes Visuales - Museo Casa Vilamajo, 2015.
Arana, Mariano. La arquitectura y el medio: la lección de Vilamajo. Montevideo: La Academia, 1977.
Arana, M., y Garabelli, L. Arquitectura renovadora en Montevideo 1915-1940. Montevideo:Fundación de Cultura Universitaria, IHA, Facultad de Arquitectura, 1991.
Artucio, L. Montevideo y la arquitectura moderna. Nº 14. Montevideo: Nuestra
Tierra, 1971.
Bossi, Agostino. Julio Vilamajo: disegni per l' arrendamento. Napoli: Oxiana, 2005.
De Sierra, Fernando. Vilamajó: aproximaciones proyectuales a la casa exenta. Montevideo: UdelaR -CSIC, 2015.
IMM, Facultad de Arquitectura. Guía Arquitectónica y Urbanística de Montevideo. Montevideo: Intendencia Municipal de Montevideo. Facultad de Arquitectura, Universidad de la República. Junta de Andalucía, 2008.
Instituto de diseño. Espacio interior y su equipamiento: Vilamajo. Montevideo: UdelaR, 2003.
Mautone, Carlos. Arq. Julio Vilamajó: un maestro de la arquitectura del Uruguay. Montevideo: Mastergraf, 2014.
Laborde, Alvaro. Julio Vilamajó: El maestro del arte real. Montevideo: Arca, 2014.
Loustau, C. Vida y Obra de Julio Vilamajó. Montevideo: 1994.
Lucchini, A. Julio Vilamajó. Su arquitectura. Montevideo: Facultad de Arquitectura, 1970.
Pantaleón, Carlos. El uso de paradigmas en el proceso proyectivo: la vivienda Vilamajó. Montevideo: UdelaR - CSIC, 2008.
Parodi, Aníbal. Entre el cielo y el suelo: la casa del arquitecto Julio Vilamajó en Montevideo. Montevideo: UdelaR - CSIC, 2009.
Petrella, Carlos. Julio Vilamajó. Semblanza de un maestro y su búsqueda de la excelencia. Montevideo, 2014.
Ponte., C. Vilamajó y la sustancia histórica. En Bossi, A.: “Julio Vilamajó. Disegni per l`arredamento”. Nápoles: 2005.
Rey, W. Arquitectura moderna en Montevideo (1920-1960). Montevideo: Facult
ad de Arquitectura, Universidad de la República, 2012.
Scheps, G. 17 registros. Facultad de Ingeniería, de Julio Vilamajó. Tesis de Doctorado, Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid, Universidad Politécnica de Madrid.
Montevideo: Facultad de Arquitectura, UdelaR. 2008.
Dieste ver además:
Reseña del Ing. Eladio Dieste extraída de Fadu-UdelaR. Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo. Eladio Dieste. http://www.fadu.edu.uy
DATOS BIOGRÁFICOS
Fecha y Lugar de Nacimiento: 1 de diciembre de 1917, en el departamento de Artigas, Uruguay.
Estudios: Egresado de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República, Uruguay en el año 1943.
Títulos Recibidos:
Asociaciones Profesionales
Premios
PRINCIPALES OBRAS
Bóvedas de doble curvatura
Bóvedas autoportantes
Silos
Estructuras plegadas
Fundaciones de máquinas
Puentes de ferrocarril
Toma de agua
Torres caladas
Muelles
PUBLICACIONES
Publicaciones
Publicaciones sobre la obra de Eladio Dieste
Información extraída de: “Eladio Dieste, 1943-1996: métodos de cálculo”, Dirección General de Arquitectura y Vivienda, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Sevilla, Junta de Andalucía, 1996. Versión de abril de 1998. ISBN: 84-8095-060-9.
AAVV. Revista de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, Nº 14. Montevideo: 2016
AA.VV. Generaciones del Ladrillo I. Pioneros. Revista Elarqa, Nº 15 (Montevideo, 1995).
AA.VV. Eladio Dieste, el maestro del ladrillo. Buenos Aires: Colección Sumarios, Biblioteca sintética de arquitectura, Volumen VIII, Julio 1980.
AA.VV. Eladio Dieste. La estructura cerámica. Bogotá y Miami: Universidad de Los Andes, Facultad de Arquitectura, University of Miami, School of Architecture, Colección SomoSur,1987.
AA.VV. Eladio Dieste. 1943-1996. Sevilla, Montevideo: Junta de Andalucía, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Agencia Española de Cooperación Internacional, 1996.
AA.VV. Inventario Dieste. Cátedra de Historia de la Arquitectura Nacional del Instituto de Historia de la Arquitectura. Montevideo: Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, UdelaR. 2015.
Dieste, Eladio, Laszlo Erdelyi & Graciela Silvestri. Escritos sobre arquitectura. Montevideo: Colección Ramos Generales, 2011.
Juan Pablo Bonta. Eladio Dieste. Buenos Aires: Universidad de Buenos Aires, Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Instituto de Arte Americano e Investigaciones Estéticas, 1963.
Graciela Silvestri. “Una biografía uruguaya” en Escritos sobre arquitectura, por Eladio Dieste. Montevideo: Colección Ramos Generales, 2012.
IHA. Modernos. Montevideo: Facultad de Arquitectura, Universidad de la República, 2015. Disponible en https://issuu.com/iha.fadu/docs/modernos-set-2015
La obra del ingeniero Eladio Dieste integra la lista tentativa de Unesco para Patrimonio de la Humanidad (6/05/2020)