Palacio de la Cultura ZIL

Aleksandr Vésnin, Victor Vésnin, Leonid Vésnin
  • Dirección: Vostochnaya ul., 4 к.1. Estación "Avtozavodskaya" metro "Dubrovka"
  • Fechas inicio-fin: 1931-1937
  • Programas: CENTRO CULTURAL
  • Sitio web: http://zilcc.ru/
  • Información útil: centro cultural: lunes a viernes: 11: 00-20: 00 - sábados y domingos: 10: 00-19: 00.

Realizado para los obreros de la fábrica de automóviles Ligachév constituye el último edificio realizado por los constructivistas y uno de los más elaborados.

Los Clubes Obreros de los ‘20 evolucionaron en los ‘30 a los Palacios de la Cultura.

El mismo concepto de condensador social, lugares de descanso y cultura para la clase obrera, pero de mayores dimensiones con más complejo programa. La misma denominación de “Palacio” sustituyendo a “Club” refleja el cambio en la sensibilidad política de los ‘20 a los ’30soviéticos. Un poderoso y centralizado centro cultural para el proletariado, a diferencia de los Clubes más descentralizados y democráticos en su concepción.

Fue diseñado rigurosamente por el método constructivista. Se puede leer en su planta en forma de “T”, la metodología “de pabellón”, donde primero se separan las distintas funciones y luego se unen por corredores dando por resultado las imágenes pictóricas planas suprematistas, típicas de los edificios constructivistas. Posee tres niveles y una terraza con observador astronómico, símbolo del ateísmo científico en esos días. Cuenta con un auditorio para 4000 personas y otro para 1200, además de biblioteca y múltiples salones para danza y distintas actividades culturales.

Implantado en las altas riveras del río Moscova como un objeto independiente en el contexto, se destruyó previamente gran parte del antiguo Monasterio que allí existía. El monasterio estaba en esos días rodeado de campos semiurbanos por lo que perfectamente se pudo haber construido el Palacio de la Cultura Obrera sin afectarle en lo más mínimo. Pero las autoridades soviéticas se aplicaron con violencia revolucionaria precisamente en el punto: el hecho de derruir el viejo orden y construir en el mismo lugar desde cero un nuevo programa revolucionario fue de gran contenido simbólico para esos días.

En lugar del “centro del oscurantismo religioso”, el palacio para la Cultura.

Tiene similitud desde varios puntos de vista al edificio del Bauhaus en Dessau. Se utiliza la gama de recursos que tanto atraían a los constructivistas; volúmenes cúbicos y cilindros encastrados, las ventanas corridas tanto en vertical como en horizontal y en sus interiores esculturales escalinatas. Mantiene su revoque exterior gris oscuro.

En la actualidad ha sido revitalizado en su programa original y es un intenso foco de cultural. Impacta su virulenta vecindad con los restos del territorio del Monasterio derruido en los cuales también funciona la iglesia ortodoxa rusa.

Texto: Marcel Blanchard