Kremlin

Anónimo
  • Fechas inicio-fin: 1485-1516
  • Información útil: Metro Teatrálnaya, Ploshad Revolútsii, Ajótniy Ryad, Aleksandróvskiy sad

El Kremlin de Moscú es el recinto amurallado que dio origen a la ciudad hacia 1147. En ruso antiguo la palabra significa precisamente “ fortaleza”.

Todas las ciudades rusas se iniciaban del mismo modo en la conjunción de dos o tres ríos y preferentemente en una colina, optimizando de ese modo la capacidad defensiva. El Kremlin de Moscú se emplazó en la colina Borovítsky, en la conjunción del río Moscóva con el Neglínaya (posteriormente entubado bajo tierra). Muy cerca desemboca otro importante afluente del Moscóva, el río Yáuza.

Fue construido en su versión final entre 1482 y 1495 por arquitectos italianos invitados por el Zar de Rusia. Se trata de un área de 27,7 hectáreas, de forma triangular rodeada por 2,5 km de murallas de ladrillo rojo almenadas a lo largo de la cual se ubican 19 torres. La muralla sur se encuentra hacia la margen izquierda del río, la norte recorre los jardines de Alexandr y al este da a la Plaza Roja. El espesor de las murallas varía entre 3,5 y 6,5 m. Su altura que se adecúa a la topografía, entre 5 y 19 m.

 En su interior se encuentran las catedrales principales de Moscú y Rusia y edificios que se fueron edificando para el gobierno de los zares y posteriormente soviético. Es el epicentro de Moscú desde donde la ciudad se fue extendiendo en murallas concéntricas. A ese esquema ruso antiguo se le superpuso el occidental barroco de rayos concéntricos que constituyen la estructura urbana de la ciudad actual.

La Torre Campanario de Iván de 81m de altura, es el punto focal y por siglos fue el punto más alto construido de toda Rusia. Los nombres de la torres tienen su encanto particular y cada una de ellas constituía una fortaleza defensiva autó- noma que podía sostenerse resistiendo aislada del resto de las torres y del interior del Kremlin. Existen además pasajes secretos que unen las torres entre sí a través de las murallas y bajo tierra, así como entre los recitos principales del Kremlin y el exterior. Se sabe que una línea especial del metro salía desde el Kremlin y conducía hasta el apartamento de Andrópov, el presidente de la URSS ex jefe del KGB y padrino político de Gorvachov. Al costado del Kremlin se ubica la gran extensión empedrada llamada Plaza Roja, y en esta la Catedral de San Basilio. Los tres en una unidad conforman el centro espiritual, religioso, político y simbó- lico de Rusia. El gobierno ruso funciona efectivamente en el Kremlin razón por la cual la palabra se utiliza metafóricamente en política internacional. Fue cerrado al público después de que  Lenin trasladara el gobierno de San Petersburgo a Moscú y permaneció vedado durante décadas. Posteriormente se abrió al público parte de su recinto. En la actualidad conviven de modo complejo las funciones de gobierno con el área cultural de museos abierta al público ruso y extranjero.

 En su centro al pie de las murallas del Kremlin se encuentra el Mausoleo de Lenin, desde el cual dirigían los actos públicos los dirigentes soviéticos. A sus costados los estrados para las autoridades que aún se siguen utilizando a los efectos en las grandes paradas. Detrás del Mausoleo, en las murallas del Kremlin están enterrados todos los dirigentes soviéticos excepto Jrushév (y Gorvachov) así como personalidades destacadas de la revolución y la URSS. Según el arquitecto italiano Vieri Quilici no se trata de una plaza tal como se entiende tradicionalmente especialmente en Italia, como un hecho concluido arquitectónicamente y claramente relacionado con la estructura de la ciudad, como punto focal de la ciudad social. El espacio es tan dilatado que sería absurdo hablar de plaza propiamente dicha. Habría que usar otro término. Y el más adecuado a Moscú es el de “intervalo”. Se trata de una distancia calculada pero no dispersiva, no de una voluntad anti-urbana. Se produce si un alejamiento de los elementos que genera un impacto visual fuerte y un paisaje urbano en sentido literal, lo que confiere a Moscú una de sus cualidades fundamentales, la capacidad de provocar una poderosa sugestión espacial y por sobre todo de imponer su imagen. Su nombre “Krásnaya Ploshad” significa “Plaza Bella”. En el ruso antiguo la palabra “roja” es sinónimo de “bella”.

Arq. Marcel Blanchard 2015.