Remodelación de una plaza en memoria de las víctimas del gueto de Cracovia.
Los espacios públicos dedicados a la memoria histórica, sobre todo cuando se refieren al Holocausto, suelen estar cargados de monumentalidad.
En una extraña paradoja, en la Plac Bohaterów Getta el recuerdo de unos hechos extraordinarios se evoca a través de objetos cotidianos. La distancia que normalmente separa el mobiliario urbano de esculturas y monumentos conmemorativos se diluye aquí en una sorprendente reconciliación entre la función y el simbolismo.
Huyendo de la espectacularidad dramática y de la sublimación de la tragedia, la contenida intervención admite un uso cotidiano y habitual de la plaza sin eludir la responsabilidad de hacer notoria la presencia de los ausentes.