Apenas terminada la construcción del teatro, fue destruido por un incendio y levantado de nuevo en 1883 por J. Schultz.
Es un edificio de lenguaje neorrenacentista.
La decoración artística es obra de varios artistas checos conocidos como la “Generación del Teatro Nacional”.
A continuación se levanta el inconfundible edificio del Teatro Nuevo, conocido en checo como Nová Scéna, con su exterior totalmente acristalado. En este teatro se llevan a cabo las representaciones de la Lanterna Magika, que consiste en espectáculos que combinan efectos en tres dimensiones, cine y danza contemporánea, tan típicamente checos como el teatro negro.