La rehabilitación del Mercado se enmarca en una intervención integral sobre el tejido urbanístico; plan de 1997 para rehabilitación y mejora de toda el área circundante.
La cubierta curva, que introduce quizás elementos ‘gaudinianos', se resuelve con una estructura de formas abovedadas en madera laminada que se sostiene en grandes vigas portantes de celosía construidas en base a tubos y apoyadas en una serie de pórticos de hormigón. El ingeniero encargado de la estructura de la cubierta fue Jose María Velasco Rivas.
En los laterales se mantuvieron las fachadas conservando las arcadas originales.
Esta nueva cubierta ondulante de madera constituye el elemento singular de la obra pues tiene como terminación un mosaico de cerámicas de colores muy vivos que representa las frutas y verduras, obra del artista Toni Comella.
Se pretende a través de esta intervención crear espacio público y densidad residencial, es así como abren el viejo mercado hacia el corazón de la manzana reduciendo también el área de centro comercial hacia la avenida Cambó.