Tomado de: Margenat, J.P. Barcos de Ladrillo. Arquitectura de referentes náuticos en el Uruguay 1930-1950. Montevideo: 2001.
Una obra de particular calidad es el edificio del restorán El Yacht, como se le denominó originalmente -donde hace algún tiempo funcionó un centro gastronómico conocido como Mercado del Parque, y luego una discoteca-, ubicado en el Parque Rodó frente a la Playa Ramírez y con acceso sobre la avenida Requena y García. Quizá inspirado en la cercana presencia del "río como mar", el edificio, realizado c. 1937 por el arquitecto Buenaventura Addiego, desarrolla marcadas características de la arquitectura "estilo barco". Este estilo se puede reconocer en sus ojos de buey, pero se manifiesta particularmente en las terrazas y barandas, que se encuentran referentes muy nítidos en lo que podrían ser las cubiertas de una embarcación. Sin embargo, la construcción presenta hoy alteraciones inaceptables que perjudican notoriamente su imagen.
La peculiaridad de esta obra, de una concepción, es que se trata de una expresión arquitectónica en la cual abandona absolutamente la simetrización del conjunto. En efecto, el edificio no exhibe una axialidad tan acentuada como la que presentaban otros edificios adscriptos a esta corriente. A cambio, adopta otras características de relacionamiento de volúmenes de acuerdo a nuevos conceptos de composición -propios del lenguaje del lenguaje del Movimiento Moderno- que no solo se encuentran en las antípodas de las ideas que manejaba el academicismo historicista, sino que lo alejan bastante en este aspecto de los demás ejemplos de la corriente arquitectónica que ocupa este trabajo. Las simetrías totales desaparecen, pero en su lugar surgen axialidades parciales, particularmente de la sala principal con el nivel superior. El edificio ha sido considerado como un ejemplo del Art Decó, pero el error de tal afirmación se hace evidente al observar la ausencia total de elementos decorativos en sus superficies y la inexistencia de una simetría totalizadora, de contrastes entre verticales y horizontales en su acceso, así como de trabajos de herrería artística, etcétera.
Las metáforas náuticas son sutiles pero claras, en especial en el volumen principal y en las terrazas superiores. Las citas navales -barandas tubulares metálicas, ojos de buey, la "popa"- aparecen dosificadas pero son sumamente sugerentes (...)
Tomado de: AAVV. Art Decó. Montevideo. Elarqa Tomo 7. Montevideo: Dos Puntos, 1999.
Avanzada la década del treinta, los paradores con escenarios para espectáculos artísticos ubicados en el Parque Rodó en las proximidades de la entonces muy popular Playa Ramírez, se adscribieron a un Art Déco claramente asociado al streamline de origen norteamericano. En este caso se trataba de un emprendimiento privado asociado a la acción de la Intendencia Municipal de Montevideo, destinado a ofrecer a sus habitantes y al numeroso público turista, un polifacético lugar de entretenimiento en temporada de verano.
Una fuente de la época refiriéndose al edificio llamado el Yacht Playa Ramírez, opinaba: “correspondiéndose con su título (…) esta construcción tiene toda la característica de un verdadero Yacht anclado en plena playa”. En efecto, el paradigma náutico es evidente y hasta redundante en la composición volumétrica, en la silueta general –que comprende una amplia terraza destinada a pista de baile al aire libre-, y en cada uno de los detalles: barandas tubulares, ojos de buey, chimeneas, “trampolín”, etcétera. (...)
NOTA NÓMADA:
En el año 2014, la Intendencia de Montevideo realizó un llamado público para la remodelación, acondicionamiento, ampliación y nueva concesión de uso de este edificio.
El primer premio lo obtuvo la propuesta presentada por el estudio de los arquitectos Pintos, Lorieto, Santellán y la empresa Arcos Dorados Uruguay (McDonald’s) con el propósito de readecuar el edificio original para el funcionamiento de un local de McDonald's (con 1.200 metros cuadrados, incluyendo restaurante y una zona de juegos para niños, Mc Café y Automac).
La intervención arquitectónica realizada recuperó los valores arquitectónicos -formales y espaciales- del edificio original. Eliminó los agregados que presentaba la construcción, logró la fluidez espacial y apostó al vínculo con el espacio público de alto valor patrimonial en el que se encuentra: el Parque Rodó y la Rambla de Montevideo. El edificio fue inaugurado en el año 2016.
Ver además:
Margenat, J.P. Barcos de Ladrillo. Arquitectura de referentes náuticos en el Uruguay 1930-1950. Montevideo: 2001.
Rey, W. Arquitectura moderna en Montevideo (1920-1960). Montevideo: Facultad de Arquitectura, Universidad de la República, 2012.
Revista El Progreso Arquitectónico en el Uruguay. N°98-99. Montevideo. Disponible en Archivo IHA.Carp.1688/20.
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